Estas croquetas de sémola rellenas son una opción diferente y riquísima para servir como entrada o en una picada. Hechas con Sémola de Trigo Bárbara, tienen una textura suave y cremosa en el interior, que contrasta con el exterior dorado y crocante. Se pueden rellenar con queso, jamón, vegetales o lo que tengas a mano.
Ingredientes:
- 1 taza de Sémola de Trigo Bárbara
- 3 tazas de leche
- 1 cucharada de manteca
- 2 cucharadas de queso rallado
- Sal, pimienta y nuez moscada a gusto
- 1 huevo
- ½ taza de pan rallado (aproximado)
- Cubitos de queso (tipo mozzarella, pategrás o port salut) o jamón
- Aceite para freír (o para pincelar si las hacés al horno)
Paso a paso
-
Preparar la base de sémola
En una olla, calentá la leche con la manteca. Cuando rompa hervor, bajá el fuego y agregá la Sémola de Trigo Bárbara en forma de lluvia, revolviendo constantemente. Cociná a fuego bajo hasta que espese (unos 5 minutos). Condimentá con sal, pimienta y nuez moscada. Agregá el queso rallado y dejá entibiar. -
Armar las croquetas
Con las manos apenas humedecidas, tomá porciones de sémola, colocá un cubito de queso o jamón en el centro y formá bolitas o croquetas alargadas. -
Empanar
Pasá cada croqueta por huevo batido y luego por pan rallado. Apretá bien para que queden selladas. -
Cocinar
Podés freírlas en abundante aceite caliente hasta que estén doradas o cocinarlas al horno, rociadas con un poco de aceite, a 200 °C hasta que estén crocantes (unos 20-25 minutos). -
Servir
Servilas calientes o tibias. Son ideales con una salsita de tomate especiada o una mayonesa de ajo.
Estas croquetas de sémola son una excelente forma de aprovechar un ingrediente simple como la sémola y transformarlo en una entrada sabrosa y distinta. Perfectas para picadas, para compartir o para abrir cualquier comida.