Estos palitos de polenta son una opción riquísima y distinta para sumar a una picada, acompañar una comida o servir como entrada. Se hacen con Polenta Bárbara, se pueden preparar al horno o fritos, y quedan geniales con un poco de queso en la mezcla. Son rendidores, económicos y muy fáciles de hacer.
Ingredientes (rinde 4 porciones):
-
1 taza de Polenta Bárbara
-
3 tazas de agua
-
1 cucharadita de sal
-
1 cucharada de manteca o aceite
-
4 cucharadas de queso rallado (tipo reggianito o parmesano)
-
Pimienta a gusto
-
Aceite para pincelar
Paso a paso
-
Cocinar la polenta
En una olla, calentá el agua con la sal. Cuando rompa hervor, agregá la Polenta Bárbara en forma de lluvia, revolviendo con cuchara de madera para evitar grumos. Cociná a fuego bajo durante 1 o 2 minutos hasta que espese. -
Condimentar y enfriar
Agregá la manteca y el queso rallado. Condimentá con pimienta a gusto y mezclá bien. Extendé la polenta en una fuente rectangular aceitada o sobre una bandeja con papel manteca, formando una capa de 1,5 a 2 cm de espesor. Dejá enfriar completamente hasta que esté firme. -
Cortar los palitos
Una vez fría, cortá la polenta en bastones del tamaño deseado. -
Hornear
Acomodá los palitos en una placa aceitada o con papel manteca. Pincelalos con un poco de aceite y horneá a 200 °C durante 20 a 25 minutos, dándolos vuelta a mitad de cocción, hasta que estén dorados y crocantes. -
Servir
Servilos calientes o tibios, solos o con alguna salsita para mojar, como alioli, queso crema con hierbas o una salsa de tomate especiada.
Los palitos de polenta con queso al horno son una forma distinta y muy sabrosa de disfrutar la polenta. Crocantes por fuera, blanditos por dentro y con un sabor que combina con todo.