Alimentos Sagemüller fue fundada en 1896 por Don Otto Sagemüller, oriundo de Alemania, quien inició sus actividades agroindustriales en Crespo, Provincia de Entre Ríos.

Su llegada a Argentina en el siglo XIX comenzó con la actividad agrícola, que pronto evolucionó con la construcción del primer molino harinero para abastecer la demanda de harina en la región.

El crecimiento de la compañía acompañó el desarrollo de la comunidad de Crespo. Ese impulso inicial marcó una línea de trabajo que sus sucesores han mantenido, dando forma a la empresa actual.

La calidad de sus productos refleja una filosofía clara y sostenida a lo largo de los años, consolidando el prestigio de Alimentos Sagemüller y sus marcas en el mercado argentino.

Hoy, la empresa es dirigida por la tercera generación, que ha sumado a su tradición industrial un enfoque comercial centrado en la innovación, el desarrollo de ventajas competitivas, la construcción de marca y la expansión de su distribución.