Pan casero saborizado con ajo y perejil

Este pan casero saborizado es ideal para acompañar una picada, una tabla de quesos o cualquier comida. Con una base de Harina 000 Bárbara, se logra una masa suave por dentro y apenas crocante por fuera. El ajo y el perejil le dan un aroma irresistible. Se puede hacer en pan de molde, en bollitos o en forma de tiras para compartir.

Ingredientes:

  • 500 g de Harina 000 Bárbara

  • 10 g de sal

  • 10 g de levadura seca (o 25 g de levadura fresca)

  • 1 cucharada de azúcar

  • 300 ml de agua tibia

  • 2 cucharadas de aceite (puede ser de girasol o de oliva)

  • 2 dientes de ajo picados

  • 2 cucharadas de perejil fresco picado

  • Extra de aceite y perejil para pincelar

Paso a paso

  1. Activar la levadura
    En un vaso, mezclá el agua tibia con la levadura y el azúcar. Dejá reposar 10 minutos hasta que haga espuma.

  2. Formar la masa
    En un bowl grande, mezclá la Harina 000 Bárbara con la sal. Hacé un hueco en el centro y agregá la mezcla de levadura, el aceite, el ajo y el perejil. Mezclá y amasá hasta formar una masa lisa y suave (unos 10 minutos).

  3. Primer levado
    Tapá el bowl con un repasador y dejá levar en un lugar cálido hasta que duplique su volumen (aproximadamente 1 hora).

  4. Formar los panes
    Desgasificá la masa (amasá apenas para sacarle el aire). Podés formar un pan grande, bollitos o bastones. Colocalos en una fuente aceitada o con papel manteca.

  5. Segundo levado y horneado
    Dejá levar nuevamente 20 a 30 minutos. Luego horneá a 180°C por 25 a 30 minutos, o hasta que estén dorados y al golpear la base suene hueco.

  6. Pincelar y servir
    Recién salidos del horno, pincelalos con un poco de aceite mezclado con perejil picado. Servilos tibios o a temperatura ambiente.

Este pan casero saborizado con ajo y perejil es todo lo que necesitás para arrancar una comida con buen sabor y aroma casero. Rinde bien, se hace con lo que hay en casa y siempre gusta.

Tip Bárbara: Si te gusta más potente, podés sumarle orégano o ají molido a la masa, o espolvorear con queso rallado antes de hornear para una versión más intensa.